domingo, 25 de enero de 2009

El Multiorgasmo


A diferencia de los hombres, las mujeres tienen la posibilidad de experimentar el multiorgasmo, una sucesión de orgasmos en un mismo acto sexual, requiriéndose tan solo un buen estado anímico para darle la bienvenida a esa explosión de placen interrumpida. La diferencia entre hombres y mujeres en este aspecto reside que, en la mujer, el periodo refractario no existe. Es decir, la mujer no requiere de un tiempo para que su organismo vuelva a estar en disposición de alcanzar un nuevo clímax sexual si continua siendo adecuadamente estimulada. Algunos estudios indican que más de un 14% de mujeres entrevistadas en relación a su satisfacción sexual, aseguran tener más de un orgasmo por encuentro sexual. Se trata, además, de una característica femenina que se mantiene a lo largo de toda la vida, sin que se conozcan razones que suspendan o disminuyan esta posibilidad orgásmica, más allá de la renuncia a la sexualidad de muchas mujeres ante la decadencia física evidente de los maridos. Otros factores influyentes en la decadencia sexual femenina son una educación y expectativas sociales restrictivas que las han limitado en la expresión espontánea y en un sano aprendizaje de la sexualidad. En 2005 se realizaron estudios que establecían que una de cada tres mujeres afirmaba no haber experimentado un orgasmo nunca o casi nunca en su vida. Según dichos estudios, sólo una de cada 10 mujeres afirmó orgasmar siempre.

Alrededor del orgasmo femenino se ha tejido cantidad de mitos falsos, como las mujeres tienen gran dificultad para obtener el excitarse, que son recatadas y en muchas ocasiones anorgásmicas. En contra de esto la biología nos revela que todas las mujeres son potencialmente multiorgásmicas, independientemente de que unas necesiten una mayor experiencia de caricias lejos de los genitales y otras, en cambio, prefieran la estimulación genital directa.

Otra falacia muy difundida es la que hace relación con la simultaneidad orgásmica. Muchas personas tienen la creencia de que la intensidad o calidad de su relación de pareja se comprueba en la capacidad de tener orgasmos simultáneos (a la vez), pero realmente esta posibilidad no tiene que ver con las condiciones emocionales o con la calidad de la relación. Es muy poco probable que algunas parejas aprendan a lograr un orgasmo simultáneo; de ser así, esto les resultaría particularmente placentero. Estas y otras concepciones erradas alrededor del orgasmo femenino, son muestras de ese sexo fantástico que desfigura la actividad sexual y afecta la expresión orgásmica.